Hostal HorizonteWeblog / ¿Tiene el botellón de los jóvenes alguna solución?
¿Tiene el botellón de los jóvenes alguna solución?
J. L. Gamallo. El espectáculo, triste espectáculo, del botellón de los fines de semana en parques, jardines, plazas y otros lugares más o menos céntricos o partados de nuestras ciudades forma ya parte de las tradiciones habituales de los viernes y los sábados. Observar a una turbamulta de chicos y chicas, cada vez más jóvenes, ingiriendo casi con desesperación todo tipo de alcoholes resulta especialmente lamentable y triste. Parece que su única preocupación e interés los fines de semana es meterse entre pecho y espalda la mayor cantidad de bebida de alta graduación, sin importar que se trata. Ambos sexos realizan una fuerte competición a ver quien es capaz de meterse más. Así, cada vez resulta más frecuente que tengan que ser atendidos jóvenes cada vez más jòvenes de intoxicación etílica. Las soluciones no van ser fáciles ni aprobadas por todos los interesados. Es evidente que algo hay que hacer, y cuando se trata de menores los padres tienen mucho que ver. Aunque dado el grado de permisividad general que hay en España con el consumo de bebidas alcohólicas, no parece la cosa fácil. El control de la venta de alcohol a los menores es algo imprescindible. Si en los grandes centros comerciales y superficies esto es prácticamente imposible, hay otras muchos pequeños establecimientos que cierran los ojos ante las ganancias. Además que siempre puede haber un alma generosa mayor de edad que se ofrece a adquirirles la bebida. El Delegado Nacional sobre Drogas, Francisco Balbín, en la presentación de una campaña de prevención sobre el consumo prematuro de alcohol, ha dicho que se estudia una iniciativa legislativa en la que se multaría a los padres de menores que acudan a urgencia por intoxicación y coma etílico. Ya veremos en que queda todo esto, dada la presencia del alcohol y sus fabricantes en la vida cotidiana y todo tipo de eventos como patrocinadores de los mismos. Aunque no tiene demasiado que ver, pero si es indicativo de la tolerancia del alcohol en la vida española, hace poco nos enteramos de los bajìsimos precios que tienen en el bar del Congreso de los Diputados cubatas y gintonics. Oyendo lo que a veces dicen sus señorías no sería extraño que muchas veces discurseen con alguna copa de más. No sabemos si esa amenza de multas a los padres les moverá a tener más cuidado con lo que hacen sus retoños y retoñas en su asueto finsemanario.
- Weblog von Kamalus
- Anmelden um Kommentare zu schreiben