La semifinal de la Liga de Campeones espera al Real Madrid

J. L. Gamallo. Durante los siglos XVI y XVII la punta de lanza del ejército turco que cernió sobre Europa era los temidos jenízaros, el cuerpo de élite de la milicias otomanas y guardia personal del sultán. No sé si los del Galatasaray venían al Bernabeu con espíritu jenízaro y dar al traste con las aspiraciones del Real Madrid. Unos 5000 seguidores, principalmente procedente de la emigración turca en Europa, se acercaron a nuestra capital para animar a su equipo y de paso hacer un poco de turismo  por la villa y corte. Pero los pobres tuvieron que irse bastante deselusionados, no sólo por el mal tiempo que ha hecho, sino también cuando comprobaron que el Real Madrid les metía tres goles, dos en la primera parte y uno en la segunda. Ronaldo, Essien e Higuaín se encargaron dejar prácticamente visto para sentencia el paso del Real Madrid a las semifinales, un contundente 3-0 que debería haber sido algo mayor. Los turcos en las gradas del fondo norte, crearon un mar de ígneas bengalas, aunque están rigurosamente prohibidas. Afortunadamente no hubo incidentes reseñables, y el resultado final sirvió para desinflar los ánimos de la hinchada jenízara del Galatasary. El Türk Telekom Arena espera ahora al Real Madrid, donde deberá confirmar y defender el espléndido tanteo del Bernabeu.